* Con ayuda de sus familiares, utilizaron materiales en desuso para fabricar simuladores de canoas que emplean para practicar.

 

Reinventarse en la adversidad.

Bajo este concepto, destacados canoístas maulinos han asumido la cuarentena por la catástrofe del Covid-19 que enfrenta nuestro país, como una oportunidad para aplicar manualidades.

A veces no es necesario invertir grandes cantidades en adquirir elementos para entrenar, cuando muchos de estos materiales se encuentran en casa.

Todo pasa por la creatividad, indicó la Seremi del Deporte, Alejandra Ramos “da gusto ver cómo nuestros deportistas realizan esfuerzos para salir adelante. Sabemos que siempre las necesidades son mayores que los recursos. Ellos han utilizado materiales que quizás estaban en desuso en sus casas y han confeccionado verdaderas embarcaciones para continuar con sus procesos. Estos ingeniosos métodos les permite entrenar, mantenerse físicamente y no perder del todo la técnica dentro de sus embarcaciones. Una  fórmula ingeniosa y creativa que les permitirá retornar en buenas condiciones para cuando pase esta emergencia sanitaria y volver la normalidad”, sostuvo la autoridad del deporte regional.

Dos interesantes ejemplos han quedado a la vista en el Club de Canotaje Municipal de Talca.

 

JONATHAN CAMPOS

 

Con tan solo 14 años de edad, Jonathan Campos Corvalán ha obtenido los últimos cinco campeonatos nacionales en categoría menores.

Dados sus éxitos deportivos y sus proyecciones deportivas, integra el Programa “Promesas Chile” que es financiado y ejecutado Mindep-IND.

En su casa entrena con apoyo de un “simulador” de kayak “a mi papá se le ocurrió. Ocupó una trotadora vieja, a la cual le instaló unas cuerdas con un palo de escobillón y los adaptó como una verdadera canoa. Creo que es idéntica…Siento que es lo mismo que ir remando” 

En tiempo regular, Jonathan Campos entrena tanto en el Río Claro como en Gimnasio.

Su mamá, Flor Corvalán comparte esta alegría que parte del ingenio por demostrarse a sí mismo “a veces está 1 hora y media remando en este simulador. Nuestra casa es pequeña, así que tuvimos que habilitar un lugar para él. Buscamos un escobillón, un palo de un closet y la trotadora y así mi marido inventó esto. Jonathan lo veo estresado, porque le gusta correr, saltar y entrenar al aire libre. Aquí es distinto, pero entiende”, reveló.

La perseverancia ha sido su mejor ayuda “hace unos años se lesionó de  la rodilla izquierda. Lo operaron con láser, y quedó impecable. A los dos meses ya estaba entrenando y ganando un campeonato nacional”, contó la orgullosa madre.

 

VANIA ESPINOZA

 

Otro ejemplo de ingenio para entrenar es la canoísta Vania Espinoza Vilches de 16 años, categoría juvenil e integrante del Club Municipal de Talca.

En su casa, la deportista diseñó también su propio simulador “con mi prima Goviana, buscamos madera, unas cuerdas, pernos… y construimos un simulador de canoa. Quedó perfecto. Resistente. Sé que no es lo mismo, porque en realidad, el agua te distrae… mirar los árboles te motiva a remar fuerte, pero hay que adaptarse a las circunstancias”, dijo.

Entrena en doble jornada: mañana y tarde “hago 1 hora de remo con este simulador y después una rutina de ejercicios. Sentadillas, flexiones de brazo y elongaciones para mantener la condición física”, añadió.

Su prima, Goviana Reyes, también canoísta expresó “muy contenta por los progresos que ha tenido Vania. La motivé a que hiciera canotaje y es muy feliz”.

Su entrenadora Viviana Vargas señaló “Vania aún es juvenil en su Club Municipal. Goviana ha sido fundamental en retomar este deporte, ya que va y viene. Se ha especializado en Canoa, en donde son pocas las mujeres. Creemos que debe consolidarse y así poderla ingresar al Programa Promesas Chile”.

Dos deportistas apoyados por sus respectivas familias quienes han demostrado una admirable creatividad y que, unidos al ingenio y las ganas, los resultados llegarán solos.