La nueva exposición forma parte de la Colección Textiles del Mundo que reúne más de 500 piezas que fueron donadas en 2018 a la Casa de Estudios por el coleccionista de arte Edward Shaw y su esposa, la artista Bernardita Zegers.
“África, la tierra que viste el cuerpo” es la nueva exposición que forma parte de una colección más amplia denominada “Textiles del Mundo”, y que fue donada en 2018 por el coleccionista de arte Edward Shaw y su esposa, la artista Bernardita Zegers a la Universidad de Talca.
Un universo de símbolos, colores, formas y de gran valor cultural se puede encontrar en esta selección de casi 80 piezas, procedentes de países africanos como Marruecos en el norte, Kenia en el este, Malí en el oeste y un maravilloso tapiz bordado de Sudáfrica, entre otras, a través de las cuales se pretende mostrar la amplitud de la Colección.
La muestra, que fue inaugurada en la Galería de Arte NUGA de la Casa de Estudios, plantea como tema central la riqueza y diversidad de culturas reflejadas en un continente que comprende 54 países e incluye la totalidad de las piezas que fueron recolectadas y adquiridas por los coleccionistas Shaw y Zegers durante sus viajes por África.
Respecto del valor patrimonial y educativo de esta nueva exposición y de la Colección “Textiles del Mundo” en general, Bernardita Zegers señaló que “estas telas ya tienen muchos años. Por delante les queda otra cantidad gigantesca de años y otra cantidad enorme de personas que pueden nutrirse del mundo y de las culturas a través de los tejidos”.
Por su parte, el rector de la Universidad de Talca, Carlos Torres Fuchslocher, destacó el compromiso que la Casa de Estudios mantiene con el arte y la cultura. “Nosotros como Universidad buscamos promover el resguardo del patrimonio, la promoción de la cultura, y por otro lado, la necesidad de los artistas de dejar su legado en buenas manos”.
Respecto de los materiales de los textiles que componen esta nueva muestra, son en su mayoría de origen natural, como la rafia, la lana, el algodón y la seda, pero también están presentes algunas fibras artificiales, como el rayón, que imitan a la seda. El uso de cuentas de vidrio en varias obras bordadas también da fe de la centenaria historia colonial que está presente en todo este continente.